¿Por qué ya no podemos entender la comunicación sin que sea sostenible?

La sostenibilidad es, sin duda, uno de esos conceptos que marcan la sociedad en la que vivimos. De hecho, como ciudadanos, cada vez somos más exigentes con nuestras administraciones públicas, nuestras empresas o marcas preferidas. Y no entenderíamos que obviaran su cuota de responsabilidad con el calentamiento global o no hicieran nada para mitigar la emisión de carbono a la atmósfera.

Muestras de buena voluntad se han dado muchas. De hecho, ya han pasado cerca de ocho años desde que la ONU aprobó la conocida como Agenda 2030, ese marco global que definió nada menos que diecisiete objetivos de desarrollo sostenible. Y, sin ir más lejos, el comité organizador de la presidencia española de la Unión Europea (que dará comienzo el próximo 1 de julio) acaba de proponer para estos seis meses un plan sostenible con medidas como el uso racional de los recursos energéticos (especialmente en lo concerniente a la iluminación led de los eventos), el fomento del transporte sostenible, la apuesta por los servicios de restauración de proximidad o la limitación de la distribución de material impreso.

La verdad es que, visto así, podríamos sentirnos orgullosos, seguir con nuestro día a día y pensar que ya está todo hecho. Ese sería el primer error. El estudio “The Decade That Matters 2.0”, elaborado por BayWa r.e., nos alerta de que la guerra en Ucrania retrasará entre dos y tres años el objetivo de la neutralidad en carbono y que el 57% de los empresarios piensa que la transición efectiva hacia la energía renovable no se llevará a cabo hasta 2050 o incluso más tarde. Vamos, que tenemos todavía un largo camino por delante.

El segundo error en el que podemos tener la tentación de caer es pensar que, con todas estas iniciativas supranacionales en marcha, “ellos” (que cada uno coloque aquí a la institución que quiera) ya se están encargando de todo. ¡Nada más lejos de la realidad! Tenemos que cambiar el “ellos” por el “nosotros” y aceptar que el cambio solo llegará si todos, en nuestras vidas personales y en la organización de nuestros negocios, empezamos a hacer las cosas de forma diferente.

Archetype lo ha entendido así siempre. Nos sentimos orgullosos de haber sido “early adopters” de cualquier iniciativa que procurara el cuidado al empleado, la diversidad o la sostenibilidad y seguimos trabajando cada día para ayudar a construir marcas atractivas, únicas y que generen un impacto positivo para las personas y el planeta. Hoy, como empresa, estamos además en plena carrera para ser Net Zero y conseguir la certificación B Corp, el modelo de empresa sostenible con los estándares de transparencia, responsabilidad legal y desempeño social y ambiental más altos del mundo. En el momento de escribir estas líneas, apenas existen 6.200 compañías acreditadas como B Corp en todo el mundo, una prueba evidente de los exhaustivos y rigurosos requisitos de evaluación y verificación que se exigen (y que deben ser además renovados cada tres años).

Mientras esperamos poder lograr este hito, seguiremos apostando por la innovación en materia de sostenibilidad. De hecho, ¿sabíais que las emisiones generadas por un evento o congreso de unas mil personas ronda las 8-15 toneladas de CO2eq? No podemos seguir aceptándolo sin más. Por eso, recientemente hemos presentado un nuevo servicio de consultoría medioambiental para la predicción, reducción, medición y compensación de la huella de carbono de cualquier tipo de evento.

En definitiva, vivimos en un momento en el que el crecimiento de la economía, sea cual sea el sector en el que trabajemos, ya no podrá hacerse a costa de la sostenibilidad. Aquellos que trabajamos en comunicación tenemos la doble responsabilidad de visibilizarlo y además predicar con el ejemplo, teniendo siempre en cuenta al medio ambiente, a nuestros empleados, clientes y proveedores en la toma de cualquier decisión de negocio.