BlaBlaCar es un proyecto innovador que nació en Francia hace más de 15 años y que ha tenido una gran acogida a nivel internacional. En España opera desde 2009 y se basa en un concepto sencillo: compartir coche para viajar. Aunque su primer objetivo es proporcionar una forma asequible de viajar, también aporta otros beneficios como un menor impacto medioambiental y relaciones sociales, o, al menos, compañía para l@s que se aburren al conducir sol@s. Además, BlaBlaCar ha diversificado su propuesta de movilidad y desde 2019 ofrece viajes en autobús.
Itziar García es la directora internacional de Comunicación y Relaciones Institucionales de BlaBlaCar. Es Licenciada en Empresariales y también en Publicidad y RRPP y Máster en Dirección de Comunicación, RRPP y Protocolo. Antes de unirse a BlaBlaCar, trabajó en varias agencias de comunicación.
Hemos entrevistado a Itziar para que nos explique cómo es trabajar en este unicornio de la economía colaborativa.
En tu perfil de LinkedIn dices: “Cuando trabajas y estudias desde los 18 años, tienes más cosas que poner aquí. Descartemos que sea por la edad. Después de 7 años trabajando en el sector seguros, descubrí que lo que me gustaba era la comunicación. De ahí mi segunda carrera y mi segundo máster antes de empezar a trabajar en agencias, donde más se aprende. Acerté. Y ahora trabajo en lo que más me gusta, en una de las empresas que más me gustan”. ¿Modificarías en algo esta descripción después de cinco años trabajando en BlaBlaCar?
Mucho me temo que lo de mi edad va a más… pero es lo único que necesitaría actualización. Por lo demás, sigo pensando que acerté con el cambio porque estoy trabajando en lo que más me gusta, en una de las empresas que más me gustan, sigue siendo cierto.
A grandes rasgos, ¿podrías compartir con nosotros cómo es la estrategia de comunicación de BlaBlaCar en España?
Hay un pilar fundamental en la estrategia de comunicación de BlaBlaCar en todos los países y es su comunidad de usuarios. De hecho, muchas veces, son ellos los portavoces de la compañía. Hay que tener en cuenta que BlaBlaCar trabaja mucho la confianza, que es uno de los ejes centrales de nuestra plataforma: opiniones de usuarios, validación de perfiles, etc. Y que el canal histórico más potente de BlaBlaCar ha sido siempre el “boca-oreja”: nuestros usuarios recomiendan a personas que todavía no han utilizado el coche compartido que lo prueben. Tanto PR como Marketing y todas nuestras estrategias se centran en acompañar todo este proceso. Ya ha quedado claro qué somos, qué hacemos. Ahora los mensajes son más específicos, más concretos. Pongo un ejemplo: la optimización de asientos vacíos y su derivada de ahorro económico y medioambiental ya están claras. Ahora buscamos optimizar no sólo espacio, sino también rutas, y el mensaje derivado es que estamos creciendo en conexión de pequeñas localidades.
Recientemente se ha publicado un libro fantástico y muy ameno: “Misión BlaBlacar. Cómo crear un unicornio con propósito” del fundador de la compañía. Nos parece una gran idea usar este formato para contar la historia de cómo surgió la idea de BlaBlacar. ¿Qué opinas tú?
La historia de cómo surgió la idea de BlaBlaCar siempre me ha parecido preciosa. El fundador de BlaBlaCar y autor del libro que acaba de salir a la venta en España, Fred Mazzella, tenía que volver a su casa en el sur de Francia en Navidad de 2003. Dejó la compra de los billetes de tren para el último momento, que es algo que puede pasarnos a todos, y no había billetes disponibles, así que tuvo que pedirle a su hermana que fuera a buscarle a París. Saliendo de París se encontraron un gran atasco. Quien ha estado en París sabe de qué hablamos. Fred empezó a fijarse en que casi todos los coches iban casi vacíos. Fue en ese viaje en el que empezó a pensar en crear una gran red social que pusiera en contacto a conductores con asientos libres y pasajeros que necesitaban realizar el mismo trayecto.
Además, Fred, y quizá esté mal que yo lo diga porque pueda parecer que le hago la pelota, tiene un perfil muy interesante. Estudió Física, hizo un Máster de Computación en Stanford y es músico. De hecho, de pequeño quería ser compositor y estudió piano en el conservatorio. Es una de esas personas que han visto la realidad desde distintos puntos de vista y tiene una mirada completa. ¡En Francia es muy famoso! y su libro no habla sólo de BlaBlaCar, sino también de esa visión emprendedora.
Pero un gran proyecto como BlaBlacar también se enfrenta a riesgos reputacionales, ¿cómo se afrontan desde el área de Comunicación amenazas como la de que ciertos viajeros no se comporten adecuadamente o traten de transportar mercancías prohibidas?
Tenemos un equipo específico, en el que nos apoyamos también desde Comunicación, que se llama “Trust&Safety” (Confianza y seguridad) que trabaja con atención al usuario en cualquier incidencia que pueda surgir en un viaje. Es cierto que estas incidencias son muy residuales, entre otras cosas gracias a la trazabilidad de la plataforma, pero por supuesto es prioritario atenderlas. Como te decía antes, la confianza de los usuarios es nuestra prioridad, por eso trabajamos cada día para que nuestra comunidad de más de 8 millones de usuarios en España viaje con las mayores garantías de seguridad.
Volviendo a tu trayectoria, Itziar, has buscado el tiempo para realizar labores en voluntariado en cooperación internacional, reinserción social, etc. ¿Querrías comentarnos en breve cómo fueron estas experiencias?
Sí, siempre he hecho voluntariados. Los he hecho en centros penitenciarios, en centros de mujeres que habían sufrido violencia de género, en la parte formativa de sus hijos, en centros de reinserción social y en proyectos internacionales como el de Misevi en Mozambique. Todas estas experiencias han sido más que enriquecedoras para mí. Si alguien se anima a conocer a Misevi, en su web misevi.es tienen toda la información. Conozco más personalmente al equipo que está ahora en Angola y desarrollan proyectos de incidencia pública, empoderamiento de la mujer, educación infantil, asistencia, discapacidad, entornos penitenciarios, etc. trabajando desde el cambio sistémico. El equipo es de una calidad profesional y humana increíbles.
En lo que respecta a la responsabilidad con la sociedad, BlaBlaCar se posiciona en la guerra de Ucrania, por ejemplo, con su asociación con la ONG Superhumans. ¿Nos podrías contar en qué consiste esta colaboración?
Nuestra comunidad y nuestros compañeros en Ucrania llevan un año demostrando una fortaleza emocionante en mitad de un contexto terrible. En este último año más de 4 millones de personas han salido de zonas de riesgo en Ucrania y se han encontrado con sus seres queridos gracias a todos los conductores voluntarios que han ofrecido sus plazas vacías. Los autobuses BlaBlaCar han sido gratuitos en toda Europa para los refugiados de guerra. Y otra iniciativa (підвезуЗСУ) de nuestra comunidad en Ucrania desplazó incluso a combatientes. Durante el verano pasado, gracias al acuerdo con las gasolineras OKKO, se amplió el límite de combustible de los conductores voluntarios.
El acuerdo con Superhumans, una ONG ucraniana que trabaja en la cirugía reconstructiva y protésica de heridos en la guerra, ha supuesto un importante paso más con donaciones directas que se sumaba a todo lo que la comunidad de usuarios ya había hecho. Hace unos días pedimos a todos nuestros usuarios en Europa que diéramos juntos un paso más apoyando una recaudación de fondos destinados a prostéticos para ucranianos heridos durante la guerra (Ucrania y Superhumans.)
También nos gustaría mucho conocer cómo enfoca BlaBlaCar la diversidad, equidad e inclusión en su estrategia de comunicación. ¿Podrías destacarnos alguna iniciativa al respecto?
Hay muchas iniciativas en marcha y muchos proyectos en ciernes. Internamente, por ejemplo, se ha creado recientemente un nuevo “Employee Resource Group” (ERG) de BlaBlaCar para mujeres, minorías de género y simpatizantes. Este ERG ha sido creado por los propios empleados para comprender mejor las necesidades de las mujeres y las minorías de género en nuestro lugar de trabajo y seguir construyendo una compañía más diversa, inclusiva y equitativa.
Finalmente, ¿querrías compartir con nosotros alguna otra iniciativa?
Sumo al libro “Misión BlaBlaCar” de Fred Mazzella otro libro del que fuera nuestro Country Manager en España durante cinco años y que es un buen amigo: “La realidad no existe” de Jaime Rodríguez de Santiago. De hecho, acompañé a Jaime, que ya es conocido por su podcast “Kaizen”, en la presentación del libro. Siempre he dicho que BlaBlaCar ha sido una gran idea, que ha coincidido en tiempos perfectos y que ha sido implementada por grandes profesionales. Fred y Jaime son dos ejemplos excelentes de los grandes perfiles que han hecho de BlaBlaCar lo que es ahora.