Entrevistamos a Ismael López y Coque Fernández, los fundadores del Santuario Gaia, en Camprodón, Girona.
El Santuario Gaia se creó en 2012 para salvar a animales que necesitan ayuda y promover el veganismo. Tras rescatar a animales como vacas, cerdos, ovejas o cabras provenientes de la explotación ganadera en su mayoría, o que han sufrido maltrato, en el Santuario Gaia les alimentan y prestan cuidados veterinarios y emocionales. Su misión es proporcionarles una vida digna hasta que fallezcan, pero Coque e Ismael nos van a explicar mucho mejor sus actividades y cómo las dan a conocer.
El Santuario Gaia acaba de cumplir 10 años y habéis recibido muchísimas felicitaciones. Para celebrarlo habéis organizado una gran fiesta con el objetivo también de recaudar fondos y comprar más terrenos… ¿echando la vista atrás, que sentís?
Orgullo y también un poco de incredulidad. Con ello me refiero a que no pensábamos llegar a este punto de haber podido salvar tantas vidas, en concreto, más de 1.800 vidas y con 500 habitantes en el santuario. Nosotros empezamos en un sitio muy pequeñito, con pocos animales, nosotros dos solos. Pasamos muchos años así. Y ahora, tras diez años, ver a tanta gente en la fiesta que nos sigue, que nos conoce… nos impresiona. Y es que, aunque estemos conectados por redes sociales, nosotros siempre estamos en el santuario y vernos cara a cara, nos emociona. Nos emociona, sobre todo, conocer a tanta gente que ha cambiado su vida tras conocer las historias de los animales que viven aquí. Nos hace sentirnos muy felices.
En lo que respecta a vuestra estrategia de comunicación, ¿tenéis definido un plan de comunicación o contáis con una persona responsable que se encargue de estas labores?
Nosotros dos somos los que nos encargamos de estas tareas, sobre todo Ismael. Lo que hacemos es contar el día a día, no hay más secretos, la verdad. Contamos todo, lo bueno y lo malo, lo que se ve es lo que hay.
Precisamente quería destacar vuestro éxito en redes sociales, tenéis muchísimos seguidores: 1,2 millones de seguidores en Facebook, 323.000 en YouTube, casi 200.000 en Instagram, 27.000 en Twitter y 147.000 seguidores del perfil de Ismael en TikTok. En mi humilde opinión, vuestra cercanía a la hora de contar el día a día en el santuario, y el cariño e individualización con la que tratáis a los animales tienen gran parte de este éxito, ¿cómo lo explicáis vosotros?
El éxito está en contar el día a día, las cosas como son. Por ejemplo, hace poco falleció Paola, una cerdita que ha estado luchando hasta el último día por caminar, porque cuando la rescatamos no caminaba. La gente ha ido viendo durante estos años las ganas que tenía de vivir, cómo ha luchado… al fallecer, la gente le tenía mucho cariño y muchas personas, especialmente algunas que tienen dificultades físicas nos han escrito y nos han dicho que cuando veían a Paola, verla luchar por caminar, les daba fuerzas para seguir viviendo y luchando también.
En concreto, ¿cómo es vuestra relación con los medios de comunicación “tradicionales”? ¿Llamáis a su puerta u ocurre al revés?
Cuando hay un tema de interés siempre son ellos los que nos llaman para realizar un reportaje o entrevista. Por ejemplo, por el tema del veganismo que está de bastante actualidad o porque un vídeo nuestro ha viralizado. Lo que sí hacemos es de vez en cuando mandar una nota de prensa como ha ocurrido con el décimo aniversario.
Mi impresión es que las redes sociales y las plataformas de mensajería electrónica como Whatsapp o Telegram han impulsado mucho el activismo animalista en los últimos años, dando a conocer situaciones de maltrato animal, promoviendo la empatía, etc. ¿qué opináis vosotros?
El acceso fácil e instantáneo a la información que permiten las redes sociales como Facebook e Instagram han sido clave para actuar en muchos casos. Por ejemplo, hemos podido realizar algunos rescates por el apoyo que hemos tenido a través de las redes sociales. Nos ha servido para ejercer presión y superar obstáculos administrativos o por parte de algunas autoridades. Ha ayudado muchísimo, un ejemplo fue el rescate de Vilar, una vaca que querían enviar al matadero y cuya vida logramos salvar gracias a esta presión mediática (Santuario Gaia logró que se considerara a Vilar “animal de compañía” y se salvara ya que cuando una vaca aparece sin identificación, el Departamento de Ganadería la envía al matadero para asegurarse de que ese animal no acabara entrando en la cadena de alimentación de los humanos).
Si no fuera por las redes sociales ni nuestro santuario, que las utiliza para retransmitir nuestra vida como una especie de Gran Hermano, ni otras organizaciones animalistas podrían llegar a tantas personas. Hace 20 años no hubiera sido posible llegar a tantas personas ni hacerlas tan partícipes.
También sois activos en LinkedIn, lo que no es muy habitual en muchas organizaciones de protección animal, ¿cómo están reaccionando las empresas? ¿Se muestras receptivas a la protección de animales que normalmente son explotados en la ganadería? ¿Con qué empresas colaboráis actualmente?
Efectivamente, buscamos empresas solidarias. Está costando, porque, como todos sabemos, dar dinero es lo que más cuesta, pero poco a poco vamos logrando que colaboran algunas como LuzSolidaria, Naturgreen, Planthia, etc. La situación es que no recibimos ninguna ayuda por parte de las administraciones, por lo que necesitamos donaciones y actualmente estas vienen de particulares. Dependemos de la generosidad de las personas que va variando, como está ocurriendo ahora. Por eso, empezamos a buscar el apoyo de empresas que también se ven beneficiadas fiscalmente si realizan donaciones al ser nosotros una fundación. No obstante, en España no hay una cultura muy grande de donaciones por parte de empresas como ocurre, por ejemplo, en Estados Unidos.
Con el evidente cambio climático, hay muchas empresas que destinan presupuestos a cuestiones medioambientales, ¿cuesta hacer entender los argumentos de protección de los animales a la hora de obtener donaciones por parte de empresas?
Ahora mismo las empresas que colaboran con nosotros son veganas o están muy en esa línea. En nuestra opinión, la protección de los animales va unida a la protección de la Naturaleza, es todo lo mismo. Solo tenemos un planeta para vivir, si no lo cuidamos…
¿Qué importancia le dais a los personajes conocidos que os apoyan a la hora de dar visibilidad al Santuario y a promover donaciones? Vemos caras muy conocidas que os muestran apoyo, desde actrices/actores como Clara Lago, Lluvia Rojo, Nathalie Poza o Dani Rovira, hasta aristócratas como Eugenia Martínez de Irujo. ¿Cómo os aproximáis a ellos/as?
Algunos de ellos/as son veganos/as, es el caso de Clara Lago y Dani Rovira. Es gente animalista, nos hemos ido conociendo y son personas ya dispuestas a ayudar a los animales.
¿No tenéis ni idea entonces de contactar con agencias de influencers…?
Para nada, esto es todo un proceso muy natural. Yo me levanto (Ismael) y hago unas stories según el ánimo que tenga. No tenemos una estrategia de comunicación ni ningún experto que nos guie. Lo que sí hacemos es ir aprendiendo día a día porque las redes sociales van cambiando. El famoso algoritmo va variando y vamos viendo qué funciona o no.
Vuestro merchandising es otra forma de comunicación y de reflejar vuestros principios, en concreto, veo muchos mensajes en torno a la diversidad (no al especismo, racismo, homofobia y sexismo) y contra los discursos del odio. ¿Qué le diríais a alguien que opina que esto de la inclusión y la diversidad “es una moda”?
Es todo la misma lucha. Se trata de igualdad. No tiene sentido ser homófobo y luego ser vegano. La homofobia, el racismo… son todo luchas contra la discriminación. Estoy seguro de que en unos años con el especismo ocurrirá como hace años pasaba con la discriminación de las mujeres que no podían votar, la esclavitud se veía como algo normal, etc. En cuanto a la gente que cree que la diversidad es una moda, pienso que realmente son ellos los que tienen un problema. Ningún ser es superior frente a otro. Se trata de no hacer daño al otro y los animales tienen que entrar aquí también.
Por último, me gustaría también destacar la buena marcha de otra iniciativa de comunicación como fue la publicación en 2020 del libro “Animales como tú“, que ya va por la octava edición y se vende también fuera de España. Supongo que ver colas de personas esperando a que firmarais ejemplares fue emocionante…
Fue muy emocionante. Han sido miles de personas las que han cambiado sus vidas y se han hecho veganos, incluso muchas personas mayores que casi lo habían leído por casualidad al verlo en la librería. Y también personas que no les gusta leer y se lo han leído en cuatro horas. Mucha gente, además, lo regala. No pensamos que fuera a tener ese éxito porque lo que cuenta es la experiencia de Ismael con los animales, después cuando Coque y yo nos conocimos, y la creación del santuario y como fuimos conociendo a los animales. Aprendimos lo que era un toro, una vaca, una cabra… no teníamos ni idea antes. Está escrito de una forma muy sencilla, como yo le hablo a mi madre o a un amigo. Creemos que esa es, de nuevo la clave del éxito, la naturalidad. Es otra vía de financiación y de difusión, ya que ha llegado a mucha gente que no era vegana y a la que se lo han regalado.